viernes, 21 de agosto de 2009

Pocos buenos amigos...y alguno que perdí.

Hacía tiempo que no vivía un verano tan intenso y movido como el actual, sin parar por casa y con cambios en mi vida. Lo mejor que tiene el verano es que invita a salir por ahí con los amigos, casi te obliga.

Es muy fácil hacer colegas o incluso amigos...pero amigos de verdad, se cuentan con una mano. Además, no se pueden hacer de un día para otro, no los puedes buscar...surgen, normalmente en los malos momentos o cuando notas que esa otra persona es de las pocas que te escucha cuando tienes problemas y que le importa lo que le cuentas, además, hay cosas que aunque no sepas por qué, solo acabas contando a ese limitado número de personas. Es difícil asimilar la pérdida de una relación así, aunque haya detalles por parte de la otra persona que indiquen que ya no eres "uno de sus mejores amigos", uno siempre intenta engañarse buscando justificación en los actos de la otra persona, pero llega el día en que no hay justificaciones que valgan y toca asimilar la realidad. Perder a un "mejor amigo" es como perder una parte de uno mismo, es perder algo que has ido creando con el tiempo y que ha formado parte de ti condicionándote la vida, cambiándola. Mi vida no sería la misma sin todo lo que he vivido y con quien lo he vivido y hay personas que pasan por tu vida y la cambian y personas que no.

Por suerte, también me ha tocado vivir el extremo contrario, no hay nada más gratificante que encontrarte con uno de esos "mejores amigos" tras un tiempo y tener la sensación de que el tiempo no ha pasado, que eres capaz de reirte a gusto y de sin darte cuenta, que sea la primera persona a la que le cuentas algo que te ronda la cabeza.

2 comentarios:

amelche dijo...

Pues sí, así es la amistad. Para bien y para mal.

Lucía Llorca Aroca dijo...

yo tengo demasiada suerte (sí, estás leyendo bien) pq sé que tengo amigos de verdad, a los que les puedo contar las cosas que pasan por mi cabeza (otra cosa es que lo haga o no).

Y tb he perdido amigos por el camino y muchas decepciones, he olvidado y he aprendido a "perdonar" o mejor a no guardar rencor, aunque nunca será igual.

Tb he encontrado nuevos amigos de esos que sabes que merecen la pena y a los que sabes que tendrás ahí para escucharte o leerte cuando más lo necesitas.

 
site stats